Cuarta y última parte:

Las sectas destructivas utilizan técnicas extraordinariamente complejas para reclutar, retener y explotar a las personas. Los líderes de “Amor y Servicio” se sienten predestinados por Dios para cumplir cierta misión en este mundo. Hay mucho secretismo en el grupo, nadie informa sobre sus dirigentes, líderes y fundador. Así mismo se mantienen en secreto sus actividades. Hasta el momento desconocemos si se ha realizado alguna investigación del fenómeno que está sucediendo, lo único que sabemos es de las víctimas que se han atrevido a relatar sus historias. La Asociación de Ayuda para los perjudicados por Grupos y Sectas Destructivas ha documentado casos de suicidios, trastornos psíquicos (psiquiátricos) y mentales, abusos, privación de la libertad y tragedias familiares relacionados con el grupo de “Amor y Servicio”.
En el mismo grupo se comenta de aquellos que han salido mal después de vivir “la experiencia”. ¿Por qué algunos se enferman más que otros? Para responderlo veamos uno de sus escritos llamado “La Enfermedad es la Misma” en donde dice: “Nosotros atestiguamos, basados en nuestras experiencias personales y en las de miles de personas, que la enfermedad es la misma, sin importar los detalles con los que se manifiesta… Nuestra experiencia en 24 años de estar funcionando, nos da la certeza de que todas las personas que sufren de enfermedad emocional, hayan ocupado la vía de escape que sea, pueden ser curadas, si así lo desean, con el mismo tratamiento”. Esto es peligrosísimo cuando hablamos de enfermos emocionales, porque no es lo mismo una depresión endógena que una exógena o un trastorno bipolar que un ataque de pánico o crisis de ansiedad. Además, los tratamientos no pueden establecerse basados en “experiencias personales”, sino a partir de una base científica. No es empírico.
Nuestro interés es que se alerte a todo mundo de los riesgos, pros y contras, de esta agrupación. Para que nadie entre en ella “a ciegas” que es lo que pretenden quienes la dirigen. Buscamos informar sobre su peligrosidad a quienes hayan oído, busquen información o estén a punto de entrar en esta secta destructiva.
“La peligrosidad de estos grupos abarca desde un mínimo, hasta un máximo, de riesgo para la salud de la persona que acude a ellos. El peligro de estos grupos estriba fundamentalmente en la asiduidad o frecuencia del sujeto a ellos, de su vulnerabilidad y estabilidad mental y emocional, de la creencia de la persona hacia los contenidos de dichos grupos, y del lugar que ocupe todo ello en su vida” (Sectas Destructivas y Grupos de Riesgo, Eloy Rodríguez Valdés).